jueves, 14 de febrero de 2013

Evolución y usos históricos



EVOLUCIÓN Y USOS 

-Usos:

Las catapultas también se han utilizado directamente contra tropas, y como es de esperarse, se montaron también en naves de guerra.
Las catapultas tales como la Ballesta fueron pensadas para el uso directo contra tropas, con arcos muy grandes que podían perforar un escudo y todavía tener bastante energía para hacer daño al portador del escudo. Las catapultas alcanzaron su pico de desarrollo alrededor del año 200 a. de C., cuando eran entendidas bastante bien para tener fórmulas matemáticas que predijeran su energía basada en su tamaño; después de eso, el desarrollo cesó durante la edad media temprana como otras muchas cosas. Fueron redescubiertas antes del año 1050 de nuestra era y gozaban de mucho renombre.
EL Mangonel y el Trebuchet catapultas clásicas de la edad media, se utilizaban principalmente contra fortificaciones, donde era preciso lanzar desde grandes distancia grandes rocas y material incandecente. El trebuchet sin embargo fué el arma de asedio por excelencia en Europa. Con una longitud del brazo impresionante de 12 mts. podía lanzar proyectiles de 100 Kg. de Peso a más de 200 mts., este ingenio pesaba 7 toneladas, y necesitaba de 60 hombres para maniobrarlo. En ocasiones se lanzaba materia orgánica descompuesta, como animales y seres humanos muertos (enemigos tomados pricioneros), etc., con el fin de provocar en el enemigo enfermedades infecciosas (Inicio supongo de las armas biológicas), y para bajar la moral del enemigo.
El Onagro, fué redescubierto en la edad media y se le llamó Mangonel, al igual que muchas otras armas, sufrieron diversas variantes, dependiendo del lugar, uso, conocimientos y necesidades. Los nombres también dependían de los lugares de fabricación o utilización, como el Trebuchet medieval, que se le llamó de nombres tan diferentes como: MachinellaTripantumPetrieraMangaIngenium, Etc.

-Evolución:

Aquí aplicaremos la palabra CATAPULTA, para referirnos a cualquier arma utilizada para lanzar proyectiles, independientemente del tipo, origen y forma.
Se cree que la catapulta (katapeltikon) fue desarrollada alrededor del año 400 a de C. en la Ciudad griega de Siracusa, por ingenieros y artesanos en el reinado de Dionysius I. Las catapultas se mencionan en Atenas en el año 360 y 350 a. de C. Ya en el 330 se entrenaban a los hombres jóvenes rutinariamente en su uso. Durante estos años, la artillería aparece haber sido considerada como arma defensiva. Finalmente aparecen en las manos de un agresor en el año 340 a de C. cuando Philip de Macedonia asaltó Perinthus.

El precursor de toda la artillería era el arco y la flecha. La idea de lanzar más lejos los proyectiles, hicieron que se desarrollara. Los arcos continuaron siendo populares, puesto que podrían ser llevados y ser manejados por un solo soldado, pero incluso ahí se desarrollaron también arcos más grandes que podrían lanzar proyectiles más grandes y más lejos. Estos arcos más grandes fueron llamados ballistae: (Ballesta). Estas ballestas más grande eran razonablemente exactas con un alcance entre los 200 y 300 metros, pero no podían ser preparadas muy rápidamente. La diferencia fundamental entre la ballesta y el arco de los cuales se deriva, era su capacidad de almacenar energía: un arco se podía doblar hacia atrás, pero un arquero solo podía almacenar energía hasta donde le permitía su fuerza, por un tiempo muy corto. La ballesta podía ser amartillada, y seguía almacenando la energía mientras que los operadores la amartillaban, además de poner su atención a otros detalles, tales como apuntar y esperar el momento perfecto para disparar. Fueron creadas muchas máquinas, más o menos parecidas pero de diferentes proporciones y especialidades, como el Oxibeles, la Cheirobalista, el Escorpión, etc.
Los artesanos de artillería romanos, idearon una solución a uno de sus problemas más grandes. Este problema era la catapulta de Palintones que lanzaba piedras, llamada Ballesta por los Romanos. La más grande de éstas máquinas era capaz de lanzar 100 libras de piedras a más de trescientas yardas. Estos máquinas fueron extremadamente complicadas en su construcción y debido a su tamaño eran también difícil de transportar. Para remediar este problema los Romanos crearon el Onagro (Burro salvaje), la máquina de sitio que la mayoría de la gente asocia hoy a la palabra. CATAPULTA. Nombrado así por el golpe que proporciona un asno con la pata trasera cuando es perseguido. El Onagro fue mucho más fácil de construir y de mantener que los palintonos porque era básicamente la mitad de la máquina. El marco delOnagro fue hecho de maderos rectangulares gruesos sostenidos por una base de madera afianzada en la tierra. En cada lado del bastidor fueron hechos dos agujeros a través de los cuales se insertó la madeja de cuerdas (tendones o crin de caballo), que fueron sostenidas en su lugar por una arandela y una contraparte. En el centro de la madeja de cuerdas se insertó un solo brazo que terminaba en una cuchara o una honda donde se acomodaba el proyectil, generalmente una piedra. El brazo se movía hacia abajo con una palanca, después se tensaba la madeja girando las arandelas, y se sostenia en su lugar por un trinquete y un gatillo. Cuando era lanzado el brazo se empujaba con la tensión de las cuerdas hacia adelante; hacia un montante apoyado que detenía el brazo y conducía el tiro hacia el blanco previsto. 
El Onagro fué una de las catapultas que más variantes tubieron. Desde el Onagro de 90°, con honda, hasta el Onagro inclinado con ruedas. Pasando por el Mangonel medieval con ruedas y cuchara en lugar de honda.


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